Hoy queremos hablar de un caso real, uno de nuestros clientes más antiguos, el Hotel Quentar en Sierra Nevada, que gracias a su confianza y sus ganas, hoy sabe cómo gestionar un pequeño hotel de corte familiar.
¿Cómo gestionar un pequeño hotel familiar? Caso real, Hotel Quéntar en Sierra Nevada.
Con este título pretendemos dar luz a muchos hoteles que como ellos en su momento necesitaron ayuda.
Para entender la necesidad de gestión de un pequeño hotel familiar, primero hay que ponerse en situación.
Tenemos un hotel muy coqueto en el municipio de Quéntar, donde las visitas a la naturaleza y la estación de esquí son el principal reclamo de los huéspedes, luego se quedan por el trato y la comida.
Nuestros clientes, propietarios del Hotel Quentar, en especial Domingo que hoy lo gestiona, querían mejorar y mejorar… tenían un restaurante «Los Ángeles» justo al lado del hotel y con él proporcionan al huésped todo lo que necesita incluso una buena comida en una terraza con vistas al barranco más espectacular de la sierra.
Así que un día confiaron en nosotros y ahora seguimos ayudando con su gestión e impulsando a este pequeño hotel codo con codo.
Proceso para empezar a gestionar un pequeño hotel
Lo primero que hay que hacer es convertir a tu hotel en un hotel departamentizado.
Es decir, aunque seamos nosotros mimos los que nos encarguemos del mantenimiento, la limpieza o la recepción, debemos tener dividido cada departamento. Esto nos ayudará a poder delegar tareas, jerarquizarlas y así poder poner foco en nuestra jornada de trabajo a cada uno de los departamentos y tareas más importantes, o las que son realmente urgente.
«Aunque hagamos todo debemos saber la prioridad en ese todo»
Es importante que si tienes un hotel de corte familiar y pequeño, debes ponerte a pensar en esta frase. Nunca podemos hacerlo todo y todo hacerlo en un día.
El principal problema de la gestión de los hoteles pequeños está en la organización y la formación del personal. Organizar cada parte como si tuviéramos un responsable para cada departamento y con sus tareas hará que nuestro día sea realmente productivo. También en cuanto a la consecución de los tiempos. Pongamos un ejemplo, si sabemos que nosotros normalmente recibimos los clientes para el check in a las 16h y ese día van a venir muchos clientes, podemos organizar los trabajos de recepción para las horas de la tarde, esos trabajos de archivo de factura o creación de las mimas etc y dar prioridad a trabajos de limpieza en las primeras horas de la mañana…
La mejor organización no asegura los resultados. Pero una estructura equivocada sería garantía de fracaso.Frase de Peter Drucker.
Esta frase se la comentamos muchas veces a nuestros clientes, porque vemos que dan palos, trabajan y trabajan y no obtienen resultados, sino todo lo contrario una sensación de cansancio y apatía que afecta al negocio. Y es que estamos casi siempre ante un caso de estructura equivocada.
Volviendo a nuestro ejemplo, eso fue el primer cambio, estructurar quién se encargaba de qué. En Hotel Quéntar, Granada, se han enfocado en la división de tareas y nosotros les ayudamos con la parte más administrativa y de reservas, así ellos pueden dedicarse a la atención del cliente y su restaurante.
La realidad es que a fecha de hoy en Quéntar tenéis un hotel que calidad precio es buenísimo, que justo en nuestra visita de este verano habían pintado y remodelado. Y lo más importante que buscan la mejora constante.
El Restaurante los Ángeles es el restaurante del hotel. Ofrece un servicio para después de las visitas de los senderistas al parque Natural de Sierra Nevada de comida típica y buen hacer que a día de hoy es un espectáculo. Y cómo se consigue entonces la correcta gestión de un hotel de corte familiar, con organización y ayuda.
Como ves no es tan complicado pero sí hay que asumirlo, es la parte más difícil, pedir ayuda y después dejarse ayudar. Gracias Domingo por confiar en Grupo AT, así da gusto.
Nos vemos pronto y si queréis que analicemos vuestro potencial solo tenéis que pinchar aquí!
0 comentarios